Con la llegada del verano solemos pasar mucho más tiempo al aire libre, nos vamos de vacaciones, vamos a las terrazas de los bares o excursiones y senderismo. Esto se traduce en estar mucho más expuestos a las posibles picaduras de insectos.
Aunque los insectos no son exclusivos de esta época del año es cuando más picaduras se producen. En muchas ocasiones, no estamos seguros de qué insecto ha podido picarnos y es importante saber de qué picadura se trata para poder actuar de manera correcta.
Ante una mayor exposición al aire libre
Los síntomas más comunes de las picaduras de insectos en verano suelen ser:
Algunas personas pueden experimentar reacciones alérgicas más graves, en esos casos deben acudir de inmediato a urgencias.
Para prevenir picaduras de insectos en verano, es recomendable usar repelentes (DEET, icaridina), ropa que cubra la piel, evitar zonas con mucha vegetación y agua estancada, y eliminar posibles criaderos de insectos en casa. Además, es importante evitar olores fuertes que atraigan a los insectos y no espantar a abejas o avispas con movimientos bruscos.
En verano, las picaduras de insectos son comunes. Para tratar una picadura te damos los siguientes consejos, pero debes tener en cuenta que, si la reacción es grave o alérgica busca atención médica.